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¿Cómo elegir el mejor aislante acústico para una vivienda?

cuál es el mejor aislamiento acústico para una viviendaLa contaminación acústica es un problema de salud pública. Según las cifras publicadas en 2020 por la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA), 1 de cada 5 europeos está expuesto a “niveles de ruido que se consideran nocivos para la salud”. Es más, en las ciudades, la mitad de la población soporta niveles de ruido más altos que los recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Así, según la AEMA, el ruido causa hasta 12.000 muertes prematuras al año. A esto hay que sumar que impide el sueño a unos 6,5 millones de europeos. España es, junto a Japón, el país con mayor índice de población del mundo expuesta a altos niveles de ruido, lo que supone un problema para más de tres millones de hogares. Ante esta perspectiva, además de la sensibilización de la sociedad, es necesario invertir en aislamiento acústico de las viviendas. 

Las razones para insonorizar una vivienda son muy variadas, pero todas se orientan a conseguir mayor confort. El aislamiento acústico nos protege del ruido que proviene del interior (personas, instalaciones, etc.) y del exterior (tráfico, locales de ocio, etc,). Pero, para elegir el aislamiento acústico más adecuado es clave identificar las fuentes de ruido. A continuación explicamos qué es conveniente valorar para optar por un material aislante u otro.

¿Qué se considera ruido?

La definición es sencilla: se considera ruido a todo el sonido no deseado. A este concepto hay que sumar el de presión acústica, que se mide en decibelios (dB). Se considera que un ruido es dañino a partir de los 75 dB. La OMS establece como límite tolerable los 55, que se pueden alcanzar fácilmente con el tráfico o con una televisión a un volumen alto. Además, hay que tener en cuenta las características del sonido: su frecuencia, su continuidad o discontinuidad o si genera vibraciones.

Para elegir el aislamiento más adecuado, se diferencian dos tipos de ruidos según según la trasmisión. Por un lado, los ruidos aéreos (voces, música), que se transmiten a través del aire, desde donde pasa a los elementos de la edificación. Por el otro, los ruidos de impactos (pisadas, objetos que se caen, etc.), que se transmiten directamente a través de la estructura del edificio.

¿Por qué aislar acústicamente mi vivienda?

En las ciudades, los ruidos de tráfico, de los vecinos, los causados por actividades de ocio, etc. pueden suponer un problema. Aunque se ajusten a los límites establecidos en las ordenanzas municipales y en la legislación autonómica de cada comunidad (RD 1367/2007), es común que resulten molestos.

En función de la fuente del ruido y de cómo nos afecta debemos elegir una solución de aislamiento u otra. Así, si tenemos vecinos ruidosos, lo más adecuado es reforzar el aislamiento de paredes, suelos y techos. Si el ruido más molesto proviene de la calle, es recomendable instalar ventanas de doble cristal con aislamiento acústico.

Pero el tema del aislamiento acústico es complejo, y no solo intervienen los niveles de ruido, sino que el aislamiento utilizado y la capacidad de absorción juegan un papel crucial. Un material aislante no mitigará el ruido si no actúa junto a un material que absorba la presión acústica.

Las propiedades del mejor aislante acústico

Una idea que conviene aclarar es la diferencia entre aislamiento acústico y absorción acústica, que se basa en el punto en que se sitúe el ruido. En caso de que el ruido se ubique en el interior, buscaremos un material con buenas propiedades de absorción, para evitar que el ruido salga. Por otro lado, si la fuente del ruido está en el exterior, necesitaremos un material aislante. Asimismo, también hay materiales que funcionan neutralizando vibraciones. En resumen, es esencial determinar qué problema tenemos para poder elegir la mejor solución. 

¿Aislamiento por el interior o por el exterior?

Si hablamos de aislar por el interior, nos centraremos en las propiedades de los materiales relacionadas con la esponjosidad, la porosidad, la baja densidad y la penetrabilidad. Todas estas características los hacen capaces de mitigar el ruido del interior. Si aislamos por el exterior tenemos la opción de hacer una reforma térmico-acústica. Con una obra así no solo aislamos la vivienda del ruido exterior, también reducimos la demanda energética. La instalación de ciertos paneles aislantes cumple con esta doble función: reducir la pérdida de energía que se produce a través de las paredes y aislar la vivienda de los ruidos exteriores.

¿Qué materiales aislantes acústicos hay?

En el mercado hay una variedad muy amplia de aislantes para el ruido. El corcho es un aislante natural y ecológico, pero también son muy utilizadas las lanas minerales, las espumas de poliuretano, polietilenos, geotextiles, yeso, cemento… También es interesante la fibra de madera, un producto natural, respetuoso con el medio ambiente y de altas prestaciones térmicas y acústicas.

La importancia de ventanas y cerramientos

Para un aislamiento acústico óptimo, las puertas y ventanas deben de ser acordes al nivel de aislamiento de las paredes. Si las mediciones han definido que el aislamiento del conjunto llega hasta un nivel de decibelios determinado, las puertas y ventanas que se instalen deben ajustarse a esas mediciones. De esta forma evitaremos la formación de los puentes térmicos y acústicos, y conseguiremos altos niveles de hermeticidad.

Por suerte, en el mercado hay disponible una gran oferta de perfilerías y cristalerías de altas prestaciones que garantizan un buen aislamiento y absorción acústica. Pero tampoco hay que olvidar que una buena ejecución en los elementos que componen la envolvente del edificio es esencial para la eficiencia energética.

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Modificado por última vez enLunes, 21 Febrero 2022 16:37

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